No hay nada peor que el olvido.
Peor que ese sentimiento tan extraño y familiar a la vez, tan desalmado como el
tiempo mismo. Pero, a pesar de todo, aun existiendo el olvido, los recuerdos no
mueren. Aún recuerdo cómo solía pensar que eras como una especie de radar, de
esos que detectan terremotos a kilómetros de distancia…pero el tuyo era mejor,
capaz de distinguir mi estado de ánimo, el de mi mente y el de mi corazón. Y
ahí estaba yo, a 1.000 kilómetros de ti, diciéndote que estaba bien al otro
lado del teléfono, mientras tú fruncías el ceño, encendías tu radar y me recordabas
lo mucho que me conocías. Y yo empeñada en mentirte, como de costumbre, porque
no había nada que desease más que tenerle en el olvido, permanentemente…
**__AlwaysCinderella__**…………………………………………………..**__AlwaysYours__**